lunes, 13 de mayo de 2013

Esquel - Los Alerces



días 24 y 25: 9 y 10/05

   Esquel es una ciudad con mas movimiento a los que veníamos acostumbrados, está en un valle bastante angosto, buena arboleda, calles anchas, la gente maneja bastante mal, como en un pueblo, pero a la vez muy tranquila.

  En turismo nos dieron datos de cabañas de alquiler, como es baja temporada se consiguen por buen precio (algo de lo que deberían aprender en Pinamar), así que fuimos al barrio Ayelen donde hay varios complejos de cabañas. Fuimos a La cautiva, y ahi quedamos por 200 $. en un buen predio, con buenas cabañas y bien equipadas.

  Estuvimos todo el dia adentro porque estuvo lloviendo salteado, sólo salí a la noche para ir al super a comprar para cocinar. Esto no impidió que podamos disfrutar del paisaje que rodea la ciudad, hacia el lado que se mire hay cerros, arboles, senderos, pero la verdad el paseo de la ciudad quedó para otra oportunidad.

  Habíamos escuchado bastante hablar de Trevelin, una colonia de galeses, así que para allá vamos. Antes cargamos combustible, y Javier quería comprar un juego de transmisión para su moto, estando por el centro se nos acerca un motoquero local con una sahara 350, Sergio Rodríguez, carpintero platense que hace hace años vive en Esquel, nos guió hacia una casa de repuestos, mientras nos contó que con un amigo salían los fines de semana a recorrer la zona. Nosotros vamos a hacer el camino del parque Los Alerces, buenísimo dijo, lo hacemos seguido y vale la pena.

  Nos dejó ahí porque tenía que irse a trabajar (hay gente que trabaja), y salimos para Trevelin, llegamos al pueblo, la verdad una decepción, como mayor atractivo había dos casas de te, seguramente atendidas por chilenos, una cascada a 18 km y una represa a 14km, nuestra visita fue de unos 18 minutos, retomamos la ruta y nos fuimos para el parque.

 Hay que aclarar que de acá en mas el camino vale la pena recorrerlo con tranquilidad, por dos motivos: la gente de la zona maneja bastante mal y rápido en ruta, no importa el color de la linea central, te pasan si ven que hay un mínimo espacio, pero por el otro si no se va tranquilo se pierde de apreciar lo que hay de un lado a otro del camino, es cambiante y en todo abundante, montaña, arboledas, cabañas, carteles de productos regionales, y así será supongo hasta pasar San Martin de los Andes.

  Ya habíamos disfrutado el camino por el parque De los Glaciares, yendo para el Perito Moreno, pero éste es diferente, mas abundante la vegetación, camino de ripio bien consolidado que lo hace mas natural, granjas cada tanto, hosterías, abundantes campings, algunas despensas, todo está de tal forma que no invaden el parque en si, al contrario, se integran perfectamente.

  Cada paso es un paisaje, el lugar invita a quedarse, pasar unos días  nos paramos 3 veces en algo mas de 40 km, si fuera por nosotros paramos muchas mas, pero también queremos llegar a El Bolsón antes que anochezca.

 Lo bueno de viajar en temporada baja es que hay muchas menos probabilidades de que  haya gente dando vueltas y todo queda para nosotros. Vale la pena, hasta lo recorrería en bicicleta...aunque no en este momento. Finalmente salimos del parque, mas que satisfechos, cubrimos las intrascendencia de Trévelin con el parque, valío la pena.

  Seguimos viaje tratando de meter la mayor cantidad de kilómetros antes de tener que parar para compensar lo poco recorrido antes, una tontería, si no hay apuro, además que fue tiempo bien invertido.

  Ya veníamos viendo cabañas en el camino, hasta que veo un cartel de un camping, paramos a preguntar, no había nadie asi que esperamos, habíamos decidido armar carpa ahí aunque no llegue nadie, al rato cayó alguien, no era el dueño pero nos dijo que ya vendría, armen acá cerca de los baños, el camping estaba cerrado pero todavía tenia agua caliente.

 Cuando llega el dueño nos ofrece una cabaña por 180 $, listo, adentro, otra noche en camas, no está mal pero tampoco es bueno mal acostumbrarse....igual eso queda para verlo después, esa noche ya esta organizada.

  Para llegar a un lugar hay que pasar por otros, siempre es así, Trevelin nos decepcionó, pero Los alerces nos compensó muy bien, es un lugar para venir varios días  acampar y disfrutar. También nos sirvió para asumir que se terminó la Patagonia agreste para nosotros, de acá en mas, cada curva es un paisaje, y no son pocas las curvas.....


1 comentario:

  1. Y yo estuve ahí con un grupo de 30 pelotudos que se creían los niños cantores de Viena los cuales estar de gira es vivir en los hoteles y salir a sacar fotos desde una combi. Fue mi último viaje con esa gente y los siguientes los hice sola donde hubo buena onda y muchos amigos. Uno de esos viajes fue en Pinamar.

    ResponderEliminar