dia 31 y 32: 16 y 17/05
Venía
todo bien por la mañana en Las Lajas, preparados para salir
medianamente en horario, el dia era mas que propicio para viajar,
poco viento, sol, etc., vamos a salir y la falcon de de Froilo no
marcha, regula bajo, pero a la hora de subir revoluciones no se
estabiliza, que hacemos? nos mandan al único mecánico de motos de la zona, en La Buitrera, un pueblito a 2km, vamos
despacio hasta llegar, el mecánico no estaba pero ya volvía, nos
atiende Don delfin, si, asi es su nombre, el padre del mecánico de
escasos 93 años, vitalidad de hierro, nos invita unos mates mientras
esperamos. Único defecto, era evangelista, no por la religión,
puede creer lo que quiera, sino que suelen ser muy aguerridos a la
hora de querer convencer al interlocutor. Pero mas allá de algunas
escaramuzas no fue tan tenaz, aunque ganas no le faltaron, si hasta
apareció un libro sobre profecías apocalípticas, pero por suerte
llegó su hijo el mecánico.
Le
contamos lo que pasaba, asi que le da arranque para ver y oh!
sorpresa sorprendente, la muy turra regulaba como un reloj suizo,
después de hacernos renegar un buen rato, que había pasado? tenía
agua, que se habia asentado durante la noche en el carburador, se ve
que con el uso se terminó yendo y dejó libre el paso de nafta, nos
mostró como purgar en caso de que suceda de nuevo y listo. No cobró
nada, "si no hice nada" dijo, asi que agradecimos,
saludamos y partimos, dos horas mas tarde de lo planeado.
Apuntamos a Chos malal, en el
camino encontramos el cartel del kilometro 2500 de la ruta 40, casi
la mitad, asi que clásica sesión fotográfica por medio, seguimos
viaje.
Junto
a un rollo de cables de fibra óptica que vemos a casi todo lo largo
de la ruta (es hora que llegue la tecnología) vemos un ciclista
sentado descansando, como ya habíamos tenido la experiencia corta
con la inglesa de los lagos, decidimos parar, con el pretexto de ver
si necesitaba algo, pero en realidad para chusmear.
Se
llama Neil Roberts, otro ingles que anda por las rutas, en este caso está
bajando desde Alaska hasta Usuhaia, asi nomás, hace 10 meses que
está en ruta, hace en promedio unos 100 km por dia, o sea, va a los
pedos, profesor de matemática y física de Northwick, si mal no
entendí. Tiene 4 hijos y un nieto, no le pregunté la edad pero debe
tener algo mas de 50 años (según Froilo dijo 56) en navidad se encontró con su familia en
Cancún, dos hermanos lo acompañaron unos kilómetros pedaleando. En
Bolivia se le abrieron la alforjas y sin darse cuenta perdió sus
utensillos de cocina y algunas cosas mas, pienso como argentino que
alguien se las abrió para que eso pase...no creo que sea lejos de lo
que pasó. Unos motoqueros brasileños le regalaron unos guantes de
cuero, no le quedaban muy cómodos pero los llevaba, también le
regalaron unas medias sucias, que hdp....pero él lo tomo con gracia,
creo que sino no haría este viaje.
Le
gusta argentina, la gente es muy dada (somos cholulos), de lo que
recorrió también le gustó Colombia, también la gente es cálida,
en cambio en Bolivia la gente es muy cortada, bueno, es mi
traducción, habrá dicho corta de estatura? en fin, una charla mas
larga con el ingles, también nos pregunto que hacíamos, en que
trabajábamos, etc. Mas que interesante haber charlado con Neil, un
inglés en américa.....
Chos
Malal es un pueblo un tanto polvoriento, con arboleda y muchos autos
chocados en el puesto caminero, son de la zona, claro. Para variar se
ven renault 12 y autos nuevos con abolladuras por igual, los accidentes
emparejan clases sociales ... Cargamos combustible y nos hacemos unos
sanguches de mortadela, había hambre, no daba para quedarse, o mejor
dicho, había luz para seguir viaje un poco mas, así que salimos
para Buta Ranquil, cuando el playero de la estación de servicios nos
dijo el nombre a Javier le brillaron los ojitos, entendió otra cosa,
frustración posterior.
Después
de varias curvas, ya había bajado el sol y llegamos al pueblo; si en
el anterior había polvo, ahora hay mas, mucha arboleda pero
mucho polvo. Empezamos a buscar alojamiento, una mujer nos dice, hay
una hostería baratita, cuando fuimos eran 350 por los tres y
poniendo un colchón en el piso para el 3º, olvídelo doña, vamos a armar
carpa donde sea.
En la policía nos dicen, pueden armar en un baldío acá al lado o en la plaza de la entrada que tiene unos asadores, nos eran los mejores lugares pero servían, de todas formas buscamos por otro lado, Froilo dijo, yo vi donde están los bomberos, y fuimos a ver que onda, entra a la oficina y sale a los minutos de grandes amigos con El subjefe del cuerpo, nos dice, lugar hay, si se puede en el polideportivo porque ellos reciben visitantes como nosotros. Habiendo hablado con el director de deportes del municipio quedó todo solucionado, tienen un salón con cocina y ademas podemos usar la cocina mas grande, finalmente nos dejaron la llave para que cerremos cuando terminen las actividades...
En la policía nos dicen, pueden armar en un baldío acá al lado o en la plaza de la entrada que tiene unos asadores, nos eran los mejores lugares pero servían, de todas formas buscamos por otro lado, Froilo dijo, yo vi donde están los bomberos, y fuimos a ver que onda, entra a la oficina y sale a los minutos de grandes amigos con El subjefe del cuerpo, nos dice, lugar hay, si se puede en el polideportivo porque ellos reciben visitantes como nosotros. Habiendo hablado con el director de deportes del municipio quedó todo solucionado, tienen un salón con cocina y ademas podemos usar la cocina mas grande, finalmente nos dejaron la llave para que cerremos cuando terminen las actividades...
Conclusión,
el camino nos sigue presentando lugares inesperados, este pueblo, mas
polvoriento que sequía santiagueña, pero con toda la buena onda
posible, a pesar de las apariencias.
La
idea original era pasar la noche y seguir viaje al otro dia, asi que
nos levantamos, desayunamos y nos cruzamos al cuartel de bomberos,
ahi nos fuimos interiorizando de las necesidades, propias de una
actividad voluntaria, por ej, la autobomba no funcionaba porque no
podían arreglar algo del motor, Froilo las hizo el enlace con un mecánico que se los arreglaba en mar del plata, con el tiempo nos
enteramos que lograron arreglarla por ahi cerca nomás.
Salimos
a recorrer el pueblo, el polvo reinante también se debía a que
llevaban 2 semanas de paro los municipales y no regaban ni
recolectaban la basura. Nos instalamos entre unas piedras elevadas
del otro lado de la ruta sobre la entrada del pueblo para tener una
panorámica y tomar unos mates, caminamos hacia el otro lado de las
piedras para ver el valle del otro lado, una pequeña estancia
sobresale en la llanura árida, una especie de piletones que vaya una
a saber para que estan ahí. Desde lo alto se ve el pueblo, su calles
de tierra, polvo mejor dicho, la siesta ya arrancaba y por lo tanto
el movimiento casi nulo, alguien pasea con un perro a lo lejos, otro
va a no se donde, no importa, porque todo queda en esa especie de
cuadro de movilidad lenta.
Terminamos
los mates y vamos caminando por una de las calles hacia el poli
(deportivo), hace bastante calor para ser mayo, debe ser parte de la
sequía, a medida que cruzamos el pueblo vemos la cantidad viejas
casas que perduran, con viejas moradoras que compiten en permanecia
con sus ranchos. Este fue el primer pueblo donde vemos muchas de
estas casas, es decir, ladrillones de adobe y techos de caña
revestidos con barro, a lo sumo les agregaron un plastico negro
debajo para terminar de darle una aislación mas adecuada. Si nos
ponemos a ver es como un viaje en el tiempo, o el tiempo dejó de
existir, que se yo, sólo se que las casas estan ahi mas allá que la
mayoría de los habitantes.
Desde
arriba de nuestro mirador se ve un camino sinuoso que sube por el
cerro desde atrás del pueblo, a la izquierda asoma tentador e
imponente el volcan Tromen, de mas de 4000 metros de altura, alguien
nos habia comentado de un pequeño crater antiquismo producto de un
meteorito, asi que decidí subir con la moto, se me sumó javier.
Nuestras motos no son las mas aptas para ese camino de ripio que
parecía hecho a pico y pala, pero fuimos igual, es difícil saber
cuanto es lo que subimos en relación al pueblo, pero lo que si se
puede decir es que se veía lejos, digamos...400 metros arriba?,
llegamos hasta la lomada visible mas alta, el camino seguía un poco
mas para perderse detrás del cerro, pero quedamos ahi, ya había
bajado el sol y no quedamos mucho margen de luz, la luna asomaba al
frente, buscamos desde arriba el bendito cráter, hasta que ahi abajo
estaba, no muy grande, tal vez 6 o 7 metros, pero la tierra de
adentro estaba completamente árida, de un color grisaceo volcánico,
un cavidad pareja asemejaba una palangana, con piedras y arbustos
alrededor y fuera de ese círculo, los pastizales de la zona. Nadie
tiene memoria de ese cráter, dicen que hay mas, pero es el único
que vimos, otro pequeño viaje en el tiempo... después, curioseando
en el google earth, vi que hay uno mas grande, pero bueno, no se
puede todo.
Pensando
en la cena nos enteramos que Sebastián, el subjefe del cuerpo de
bomberos, nos había invitado a comer en su casa, la especialidad?
Pollo al disco, vamos..... Conocimos a su familia mientras marchaba
el morfi, afuera hacía frío, en un momento pregunto que temperatura
haría, dice Seba, 1 o 2 grados.....diez de la noche, frío seco,
pero frío al fin. Nos contaron de la zona, que se puede hallar, como
esas piedras con cristales de colores en su interior, bueno, hay un
cerro donde se pueden encontrar y nos regalaron algunas piedras.
Mañana
siguiente, hora de partir, en el salón donde estábamos instalados
entra un pibe, Braian se llama, de unos 13 años, muy curioso, charla con uno y con
otro, en un momento le presto mi cámara (nunca hago eso) y sacó
unas cuántas fotos, fue a la calle, saco a la gente, a los chicos,
algunas buenas tomas... Pienso en otra incongruencia social que
encontramos en el camino, un chico en un pueblo remoto de Neuquén,
que se maravilla por tener una vieja camara reflex digital en la mano
y tiene la oportunidad de usarla, muestra cierta cualidad para que
probablemente después de ese instante, de esa fractura en su vida
cotidiana, volver a la misma sin variantes... o tal vez, ese instante
traído con unos viajantes le haya dejado una semilla que alguna vez
germine. No lo sé, nunca lo sabremos.
Antes
de irnos charlamos con el director de deportes, Juan Rodríguez, que
nos dio sin problema lugar donde parar, no es profesor de educación
física ni afin, sólo es un lugareño que siempre aportó al pueblo,
por motus propio empezó a juntar chicos para jugar al futbol, porque
siempre sostuvo que el problema del pueblo es la falta de actividad y
hoy en día se ve complicado por la droga y el alcohol, es una
persona muy querida en el pueblo, principalmente con los chicos. Él
nos contó la historia de este chico….. abusado por un padrastro,
madre drogadicta que lo había entregado a una familia y después lo
buscó para tenerlo pero con las mismas fallas de siempre, entonces
uno empieza a entender cosas desde otro lado, porque el chico que es
tan sociable con nosotros es a su vez muy conflictivo con sus
compañeros, probablemente lo que lo lleva a eso no es mas (ni menos)
que falta de cariño.
Nunca
sabemos realmente que vamos a encontrar y llevarnos de cada lugar, un
viaje que parece tan claro como recorrer una ruta mas que conocida,
no es mas que una intención de encontrar lo que no podemos
prever.....y esa es la esencia real del viaje.