dia 28: 13/05
Ya teníamos ganas de mover para escapar del clima lluvioso inestable, a veces despejaba y al toque una nube venía con su llorisqueo molesto, lo suficiente para mojar. nos fuimos de Bariloche, hacia el norte pintaba despejado, asi que bien, cruzamos en río Limay, para entrar en la Provincia de Neuquén, sacamos las clásicas fotos de cartel, y seguimos viaje, unos kilómetros adelante nos encontramos con nubes y casi automáticamente lluvia, ¿porque no nos dejan ir las p....?
Hacemos unos kilómetros hasta encontrar una garita, paramos, tomamos unos mates, cuando paró un poco seguimos viaje y otra vez lluvia, asi que seguimos hasta Villa La Angostura, un lugar agradable y pintoresco, sería mas apreciable y no hubiera estado lloviendo, pero no era el caso, paramos en la YPF a cargar y decidir que hacíamos, yo quería parar ahí, me parecía mas razonable, pero decidimos seguir.
La ruta pasa por lugares espectaculares, como para apreciar, ir parando, pero la lluvia nos hacía seguir, entramos en un tramo nuevo de la ruta, al fin algo bueno, lo que en mapas figura como ripio estaba pavimentado reciente, no sabíamos cuanto pero no tenía sentido especular. Ya iba mirando en el camino un lugar donde parar, que podamos tener un reparo, veo unas casas abandonadas, paramos mas adelante y les digo, yo me quedaría, y decidimos seguir hasta encontrar una casa o algo, hicimos dos kilometros y se termina el asfalto, "bueno, volvamos, yo por ripio con lluvia no sigo", y volvimos a las casas abandonadas. Eran parte de un hospedaje o algo así, habia una casa al fondo habitada, pero no había nadie, queríamos quedarnos en el alero esperando que lleguen y Javier nos dice, vayamos al puente de al lado, fuimos y resultó ser mas que apto, teniamos lugar para armar la carpa y dejar las motos.
Aclaro algo, no estaba permitido acampar ni hacer fuego, todo lo contrario hicimos, buscamos leña y armamos fuego ahi nomas, no de mala leche sino por necesidad, estábamos empapados, claro está que si el dia era normal ni se nos habría ocurrido hacerlo.
Así fue como llegamos gracias a la lluvia a un lugar especial, ni a Froilo ni a mi nos causaba gracias seguir con lluvia y perdernos del paisaje permanentemente variable, el arroyo donde quedamos es el Rucamalen.
Cualquiera de nosotros ha visto fotos de aguas cristalinas de fondo verde azulado, piedras, troncos, etc., esos lugares no existen pensamos con nuestro lado negativo, personalmente venía a conocer esos ríos mentirosos, desenmascararlos si eran posible.....no lo es, esos ríos no mienten, existen, invitan a meterse, tanto es asi que Javier para lavar las cosas después de comer, siguió bajando sin darse cuenta que ya estaba en el agua, casi se nos va, lo quedamos mirando con Froilo pensando quien se metería a buscarlo, el clima no daba para estar mojado. Pero salió, solo se mojó las piernas.
Noche fresca seguro, comimos temprano una sopa y arroz condimentado, Froilo se acostó y con Javi nos quedamos haciendo fogón, cada tanto, pasaba algún auto sobre el puente, pero la ruta no es transitada. Despejó el cielo, otra vez noche de estrellas en cielo limpio, y el vapor que levantaba del agua no era buena señal, si, la noche sería fresca. Tipo doce no da para mas, habíamos puesto una pelicula en la compu, pero la cortamos y nos fuimos a dormir.
Un día largo tuvimos, como siempre, salimos sin pensar que nos depará, pero abiertos a la situación que sea, salimos con sol de Bariloche, pero tuvimos lluvia por mas de 100 km, perdimos de conocer Villa La Angostura, habrá que volver, pero a cambio por casualidad y necesidad terminamos pasando la noche en el parque, en el medio de la nada, o mejor, en el medio de todo, y eso sí que vale la pena....
No hay comentarios:
Publicar un comentario